Nunca fuimos ángeles, ni demonios,
solo porque no estuvimos en el paraíso,
ni cruzamos el Edén descalzos,
porque nos quisimos
con tanta fuerza que nos hicimos daño,
que acabamos con el corazón escayolado
y destruimos el puzzle
de nuestra historia en un segundo
Nunca fuimos ángeles, ni demonios,
ni nos disfrazamos de Charlot,
a pesar del bombín, el bigote y el bastón,
porque un zapato sabe mejor,
y jugamos con el mundo en nuestras manos,
como en El Gran Dictador,
por nuestro corazón,
el gran dictador de izquierdas,
que no lo podemos negar.
Nunca fuimos ángeles, ni demonios,
ni quiero que lo seamos,
me queda bien el disfraz de humano
que ayer alquilé,
me queda bien la sinceridad como corbata,
y la humanidad de abrigo,
las palabras de verdad.
No me veo en el cielo,
pero el infierno queda lejos.
No lo merecemos,
¿lo discutimos?
mis argumentos son reales,
ni tu ni yo somos lo que creemos ser,
ni jamás seremos lo que queremos ser,
ni tu ni yo olvidaremos,
como nos desnuda el amanecer.
Nunca fuimos ángeles, ni demonios,
nunca lo seremos te lo puedo prometer
aunque descendamos a las profundidades
al recóndito rincón escondido,
entre la penumbra, y la oscuridad,
entre las ascuas de las llamas,
aunque exista de verdad.
Nunca fuimos ángeles, ni demonios,
ni tenemos personalidad,
ni descubrimos las memorias
al mundo por amar,
nunca fuimos ángeles
pero te puedo contar
que el mundo que dejé
era mejor que el que me encontré,
aunque el limbo me secuestre
y no pueda salir de él.
Hay lugares donde escapamos sin necesidad de movernos del sitio, este pretende ser uno de ellos. Disfruten de su estancia y sientan las palabras.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Honor
Siempre me dijeron que el hombre viste por los pies, que la palabra es el contrato más valioso y que esos pactos están para cumplirse. Pero...
-
El tiempo hace tiempo que dejó de dormir en un reloj, el reloj no detiene el control, ni el talento, ni el tiento… No distingo entre el bi...
-
Pasará, Irremediablemente todo pasará. Para bien o para mal. Todo acaba, aunque creyésemos que nunca iba a terminar Las historias, aunque ...
No hay comentarios:
Publicar un comentario