martes, 24 de junio de 2014

San Juan

Y allá, por San Juan
sus gaviotas de fuego volaron a ras.
Llamas y carbones,
deseosos por desear,
cuerpos, pieles, corazones...
Almas a la deriva que conquistar.

Los cabrones fuera de mi vida,
que otros ocupen su lugar.
Sonrían sin condiciones,
es mi única petición si se quiere quedar.
Agarre mi mano, saqueme a bailar.

Con cariño un niño se acuna,
y una verdad si es sincera se acuña...
Pero la impaciencia llegó
y nos arrancó con odio las uñas,
prométeme cambiar.
Espero que lo cumplas.

Entre hoja y hoja, deshoja,
que cada pétalo de margarita
es un miedo que te quieres despojar.
Somos miedos y dudas,
somos deseos a orillas de la luna.

El fuego se apaga sin aire,
y la pasión se acaba si no te das.
Entonces tiemblo... Y pierdo...
Y pierdo... Me pierdo.
Soy derrota en esta guerra por amar.
Soy esa victoria que siguiendo
las huellas de tu camino, llegará.

Soy victima de la bengala
que se apaga sin llegar a salvar
a quien nada a la deriva,
en mitad de un océano
de amor sin amar.
Soy prisionero de una sonrisa sin brillo.
Soy cielo apunto de estallar.

Eres luz, eres calma...
Eres mi incierto destino...
Eres la parte de mi que vive en femenino. 
Eres ese amor que se sirve del tiempo, Rojo pasion... Piel sabor a vino.
La sangre corre. Hoy me siento vivo.

miércoles, 11 de junio de 2014

Mi pequeño superheroe

Mi pequeño se puso su capa de superhéroe para volver a salvarnos una vez mas. Nos rescató de otra batalla casi perdida. Nos volvió a dar una lección más de sacrificio y fuerza. Es la actitud propia de un guerrero. Esos que luchan con el corazón por escudo, esos que saben que solo se ganan las guerras cuando peleas mirando a los ojos de tu enemigo. Quien a hierro mata a sentimiento muere. Una verdad absoluta donde las haya, porque sólo somos fibras nerviosas directas al impulso y al delirio del los sentidos. Asi es él, mi héroe. Puro amor. Con sus gafas de rayos láser y su pelo revuelto. Con la sonrisa de quien se siente confiado. Vino de nuevo con su capa azul, para recordarnos que la vida es un instante, un segundo efímero. Un adiós sin tiempo para decir hasta luego. Por eso llegó al rescate de los que aun somos ingenuos, porque si quieres puedes, y si no inténtalo, y después ya lo vemos. Pequeño genio maldito, cuanto te quiero.

domingo, 8 de junio de 2014

Agujero Negro

Déjame caer a tu agujero negro.
Reina de corazones.
As de picas de asfalto deshecho.
Quedate conmigo
donde pueda verte sin abrir los ojos.

Me pierdo en el camino.
En tu triángulo de las bermudas,
entre las palmeras de tus piernas.
Al calor de unos ojos mientras me miran,
sobre la arena fina de tu piel desnuda.

Monosilabos tras tres besos...
Me giras la cabeza de golpe,
muerdes mi cuello,
eres la araña de mi espalda,
quedas colgada de mi corazón.

Entonces ries y lloras. Todo a la vez.
Besos de verdad. Caricias y más besos.
Los de la locura tras ellos.
Dicen que se llama sexo
cuando el juego se convierte en deseo.

Dió igual que fuesemos desconocidos,
llevaba esperándote toda la vida.
Al final descifré la clave oculta
entre aquellos mensajes prohibidos...

Pasamos página, ayer éramos amigos.
Pero hoy nos queda mañana,
cuando al despertarse la luna descubra
que solo tú y yo somos
la verdadera historia de amor
que pocos se esperaban.

Culpable del hielo

Me siento culpable  de robar sueños inocentes. Culpable por robar sueños de inocencia infantil. Culpable del hielo que mantiene vivo los mie...