viernes, 24 de septiembre de 2010

Ahí estás

¿Dónde estás princesa?
¿Por qué te escapas de mi vida
sin dejar respuesta?
¿Dónde estás mi reina?
Llevo un millón de horas esperando
y no te tengo cerca.

Llevo tiempo dando vueltas a la rueda,
y mi cabeza no consigue descansar,
llevo tiempo sin mirar a nadie más,
todo eres tú, y tú, y tú...
Sin más, sin nada más...
Eres tú quien completa mi mitad.

Vienes y vas, y al vaivén del aire
el perfume del amor ha saturado la amistad,
Vas y vienes, y al vaivén del tiempo
he arrebatado lo que había
por ser ambicioso, por querer más.
Egoísmo es mi amor por ti,¿verdad?

Flores secas y grava,
paisajes muertos ante tu silencio,
miradas vacías para mi soledad.
Tormentas de verano en invierno,
los segundos vuelven hacia atrás
y mi vida se descabalga si no estás.

Pesadillas de madrugada,
me despierto a la par que me conciencio,
me ha quedado claro que ya nunca estarás.
Sólo es amistad... algo que lamentar,
sólo vuelvo a casa, solo y cabizbajo...
Algo me grita a lo lejos...
A pesar de todo, ahí estás.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Extraña paradoja de sentimientos

Miro al cielo enfurecido,
dentro de mi arde el rencor
y los amuletos no sirven de nada
es la tendencia del destino
quien obliga a marcar los pasos.
Sobran tantas cosas
que no sé cual he de elegir,
y necesito tanto de ellas
como ellas de mi.
Extraña paradoja de sentimientos,
sentidos paradójicos por momentos.

Palabras de auxilio sin respuesta.
Sigo gritando al cielo,
tu nombre lleva tatuado meses
a mis cuerdas vocales.
A cada respiración desacompasada
es un suspiro con tus silabas
la que le sucede.
A cada roce de tu piel
es una chispa eléctrica
la que recorre mi espina dorsal,
me inmoviliza, me paraliza,
me devuelve al lugar donde te conocí,
al día en que miré
aquella estrellita de primavera
que me enamoró con su esplendor.

Extraña paradoja de sentimientos,
mi dermis se sonrosa de pensar
en como mostrarme integro
y recorrer esas dos palabras,
mágicas y a la vez gélidas
si no se escuchan con claridad,
sinceras y tristes
si las dos palabras son para un final.
Sólo el riesgo se entiende
cuando los hechos se producen,
solo los sentimientos conducen
al refugio del amor y el duende.

Se me olvidó caminar
si no es contigo,
llueve a diario
desde que las lágrimas
salen de mi corazón.
Mis versos se quiebran,
intentan descubrirte quien soy,
solo son simples palabras sinceras,
esperando oírte
las palabras de dulce Julieta,
espero contemplar tu brillo
y ver como pasas de estrella
a inmenso y eterno cometa.
Extraña paradoja de sentimientos,
las nuevas constelaciones
a tu llegada parecen completas.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Pienso

Pienso...
durante las veinticuatro horas del día
no hago más que eso, pensar.
Será que ahora mismo
no tengo nada mejor que hacer
que encontrarme con mi alma,
mi pequeño tesoro
que tan abandonado estuvo,
y cuando fui a buscarlo
no lo encontraba
por la torre de ideas que lo aplastaron.
Lo encontré con arañazos,
con jirones en la piel,
alguna que otra fisura...

Le he pedido perdón mil veces,
le he jurado por mi vida
que no volverá a suceder,
que no la dejaré de nuevo,
que será mi única amante fiel...
La he susurrado al oído
unos pequeños versos:
"Cuidaré de ti,
aunque el tiempo pase
y la tormenta del tiempo
nos llene de miedos
el sendero de los días
que se despiden al atardecer..."

Pienso...
Mis momentos se esfuman
tratando de deshacer mis actos,
solo el paso del tiempo
es quien me vuelve a recordar mis errores,
se aproxima, me mira a los ojos,
me inunda de lágrimas,
me ahogo en la desesperanza,
pero entre las tinieblas
encuentro que tu haz de luz
y la ilusión empujan
los nubarrones al norte.

No me reconcilio con ella,
por mas que he suplicado de rodillas,
no soy capaz de arrancarle
un guiño de complicidad de la mirada,
una carcajada vacía de miedos,
un secreto emocionado,
unas lágrimas de amor,
el vello de punta,
la piel erizada,
la luz de tu mirar eclipsada,
la felicidad del alma enamorada.

Pienso...
Los silencios se postran,
me miras cuando ya no miraba,
te diluyes en agua de luna derramada,
vacía mis días y mis noches,
enloqueceré por no sentir tus latidos,
por no sentir tu calor
cuando tenga frío,
por no ser mas que un humano,
aunque algún día me sentí algo mas
porque sé que te he querido.
Pienso y sueño,
puede que de nuevo,
aunque parezca extraño,
hayamos coincidido.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Todo amor acaba siendo dolor

Después de todo el alma se hace pedazos,
y las grietas llegan a mis cimientos.
Yo me derrumbo, me reduzco a cenizas
y todo porque ya no estás.
Es duro sentirse polvo en mitad de la nada.

Me quedo vagando en el aire,
floto y me traslado,
me llevas donde quieres, me soplas
y me vuelvo a unir
con las moléculas que quedaron rotas.
Me esparces por todo el espacio,
me has derrotado, si,
me has deshecho, me has sacado fuera,
me has matado...

No queda nada de mi, sólo mis letras,
mis frustrados pensamientos,
mis análisis sin orden,
mis sueños y el amor por ti,
porque en algún momento he amado.

Me siento como la última estrella del cielo al amanecer,
apenas ofrezco brillo al cielo iluminado;
un cielo que nadie contempla
y que descubre que lo que paso en la noche
forma parte de nuestro pasado.

Cansado de estar solo,
salí decidido a buscarte
y nunca más te encontré.
Nunca más entre las caras de la gente
hallé tu sonrisa de niña,
nunca más pude escribirte
como cuando fuiste mi musa.

Polvo... Sólo eso soy,
arena cubriendo el desierto.
Sueños rotos...
Olvido que no existe el amor,
allá donde me pose
ya no quiero un rayo de luz,
porque quiero morir sólo
y tranquilo sin ese dolor.

Todo amor acaba siendo dolor,
es absurdo lo sé...
Amar es muy grande,
pero cuando se acaba
el corazón se inflama
y empieza a doler.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Quizá

Quizá me sienta sólo y tenga que recurrir
a pensar de nuevo en ti,
pero lo que no te daré nunca
será el placer de verme de nuevo llorar.
No te mereces mis lágrimas,
ni sentir mis pensamientos,
no te mereces mis penas
porque ya no te quiero,
ni verme enamorado de ti,
solo te echaba de menos...

Quizá nunca te tuve
y no hago mas que mentir
a mis pensamientos con mis sueños
para sentirte un poco mas aquí.
No me merezco el silencio,
no me merezco sufrir,
ni tampoco el ser eterno
porque también es bello morir,
morir de amor si se puede
antes que marches de mi.

Quizá el tiempo pase,
o vuelva hacia detrás por ti,
quizá llueva hacia arriba,
y el Sol caliente sin salir,
pero si de verdad estas cerca
dejame verte por fin,
porque he soñado con tus gestos
y no los encuentro al dormir,
porque he bebido de tu boca
y me envenené de ti.

Quizá me ahogue en mis sueños,
o me encuentre cruzando el estrecho
hasta que una ola me arrastre
y me entregue desmayado a tu pecho,
y me dormiré tranquilo
porque mis sueños se han cumplido,
porque sigues tan sencillamente hermosa
y apenas te has movido
por dejarme descansando en tu cuerpo,
porque siempre he sido un crío.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Luz de Mar

Todo era penumbra, todo era oscuro,
nada tenía sentido,
hasta que caminando por los días
me golpeó en el rostro aquel brillo indudable.
Luz de Mar que me ciega,
Luz de Mar profunda y pura,
Luz de Mar ahoga mis dudas...

La Luz de Mar se cuela por cualquier resquicio
de las persianas de mi corazón
y me descubre solo
caminando agarrado del brazo de la soledad,
me arrebata de ella,
sólo espero que sea ella
quien quiera pasear conmigo.
Que poco a poco me descubra.

Yo por mi parte creo conocerla bien,
esa sonrisa sincera,
esos aires de flamenca,
esos ojos radiantes.
Sus formas, su piel morena,
el azabache de su pelo,
sus labios que me han robado el alma...
Luz de Mar que me llena la vida,
Luz de Mar,ahoga mis dudas.

Nunca dejes de alumbrar corazones,
aunque la calidez de tus besos
me arropasen por un segundo...
No dejes que las sombras enfríen tus gestos,
llámame si necesitas cobijo,
intentaré que tu llama no se apague,
lo intentaré aunque del cielo
lluevan lágrimas a raudales.
Luz de Mar, no me olvides
que presiento que algo grande
nos llenará de despertares.
Luz de Mar, al olor de las rosas
te sorprenderé entre las sábanas
donde se unen los mares.

Luz de Mar calienta mi rostro,
dale la calidez necesaria
para confiar de nuevo en el ser humano.
Luz de Mar volveré a verte de nuevo
aunque me deje la vida
en este extraño juego,
en el que los locos se queman
por el amor, por su fuego.
Luz de Mar que me ciega,
Luz de Mar profunda y pura,
Luz de Mar despojame de mis dudas...

viernes, 10 de septiembre de 2010

El suicidio perfecto

El suicidio perfecto no es irrepetible...
es un acto de conciliación
con la dolorosa alma del ser humano,
un reproche gratuito
del hombre hacia su espíritu...

El suicidio llena de paz
la perturbada moral de las personas...
Los más fuertes suelen ser los primeros en caer,
los más débiles dejan volar su imanación
para evitar ser arrastrados hacia la penumbra.
El suicidio llena de paz
las manchadas conciencias blancas
que se cargan sobre nuestra espalda.
La fuerza reside en las palabras,
no en los musculosos brazos.
La fuerza duerme en los actos de cada uno,
no en las mentiras tras las que solemos refugiarnos.
El suicidio llena de paz
todo lo que envuelve el nerviosismo
antes de la pactada calma...

El suicidio perfecto no es irreprochable...
El corazón se quiebra en soledad,
el vaso de vino lleno de amarguras y penas,
con la cuerda por corbata,
con el aliento ahogándose en silencio...

El suicidio es un segundo de coraje
en las infinitas posibilidades de nuestras manos,
es un dulce con fecha de caducidad,
la hoja que se cae del árbol antes del otoño,
es la gota de agua en el desierto.
El dolor se encuentra solo en nuestra cabeza,
el corazón únicamente se dedica a palpitar incesable
hasta que marquen las doce en punto
y las dos agujas se nos claven como vampíricas estacas...

El suicidio perfecto no es inquebrantable...
Es un movimiento certero,
entre la razón y los impulsos,
se agitan, se enervan, se impulsan
y el baño de sangre es inevitable...

El suicidio perfecto eres tú...
Es recibir a pecho descubierto el disparo de tus labios,
o sentirme azotado por la suavidad de tus caricias.
Es beber el veneno del manantial de tus senos,
o son los alaridos de placer de tus cálidos gemidos.
El suicidio perfecto eres tú...
Miles de puñales son para mi
cada una de las veces que me dices que me deseas,
miles de espadas al aire
que se descubren por sentirme tu fiel escudero amante.
El suicidio perfecto eres tú...
Cuando desvelas tus encantos
a las gélidas miradas del aire
y se enturbia tras pasar por tu vello escondido
entre la inocencia de quien empieza amarte.

sábado, 4 de septiembre de 2010

No dejes nunca de sonreír

No dejes nunca de sonreír
porque tu sonrisa me da aire
e ilumina mi vida
cuando todo se hace oscuro,
cuando los días se hacen cuesta arriba
y me cuesta llegar a la cima.

Refleja tu rostro en el agua,
y deja que la corriente lo arrastre
hacia aquel molino de sentimientos,
dale la fuerza necesaria para mover sus aspas
y que poco a poco los duros momentos se suavicen
y que pasen por mi garganta,
que tu presencia me alimente.

Haz de los días simples segundos,
que pasen rápido por disfrutar el uno del otro,
Borra de aquella vieja canción que tanto escucho,
la frase de desamor que tanto me gusta,
que la busque mientras escucho
su suave melodía a tu lado
y me vuelva loco porque ya no esta.
Simplemente fue un sueño
mientras me devuelves las ganas de vivir.

Mi corazón se despierta
si al amanecer sobresaltado,
no encuentra tu presencia,
él que te llama y tú no contestas,
el que lágrimas derrama
limpia de oscuridad su alma,
todo parece mas limpio
después de la tempestad llega la calma.


Brevedad, fracción de segundos sin ti,
mis párpadeos impiden ver
que sigues ahí enfrente
y esa penumbra me da miedo,
se vuelve contra mi
y congela mis brazos,
sino vienes a mi,
no soy capaz de lanzarlos.

Pero cuando mis ojos
me permiten verte de nuevo
y sigues ahí con tu precioso cabello,
con tus formas, con tus risas,
con tus carcajadas de niño pequeño
me enamoro de ti como un loco.

No dejes nunca de sonreír
porque tu sonrisa me llena de vida,
no dejes nunca de sonreír
porque eres la Luna en mi noche
y el Sol en mi día.

Culpable del hielo

Me siento culpable  de robar sueños inocentes. Culpable por robar sueños de inocencia infantil. Culpable del hielo que mantiene vivo los mie...