99… ¿Cuántos de nosotros
llegaremos a contarlos
sin olvidar los números que quedaron
por detrás desperdigados?
99… Son las veces que me he caído,
una menos de las que me he levantado
por muy hondo que me hayan derribado,
aún escarbando en el pasado.
99… Y descanso, tranquilo y reposado
a la luz de las velas,
absorbiendo el perfume de tu cuerpo
que se quedó en el baño.
99… Es la perfección incompleta,
es casi cómo tú, es casi como yo.
Sólo seremos perfectos
si nos quitamos las caretas.
99… Son las notas escritas
durante un año de más alegría que soledad,
un año en el que se ha cerrado
casi un círculo que tenia ganas de terminar.
99… Son las ganas que tengo
de que ese fenómeno que se llama A,
llegue a mi puerta y la derribé,
pero que esta vez pase y se quede a cenar.
99... Es un número incompleto
y si otro nueve le añades
es un trío infernal
cuando le dé por girar.
99... Es la más pura perfección,
una alineación de astros puede formar
si añades la unidad que falta al centenar,
si añades una sonrisa me gusta más.
100... Colorín colorado
este cuento ha terminado.
Ahora sí los versos que he escrito
son parte del oscuro pasado.
Hay lugares donde escapamos sin necesidad de movernos del sitio, este pretende ser uno de ellos. Disfruten de su estancia y sientan las palabras.
miércoles, 7 de diciembre de 2011
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